A pesar del entusiasmo que despertaron, solo el 15 % o el 20 % de las visitas sorpresa del expresidente Danilo Medina han sido efectivos hasta el momento, y el resto de ellas aún no han terminado o “fracasaron” porque no cumplieron su cometido. A pesar del entusiasmo que despertaron, solo el 15 % o el 20 % de las visitas sorpresa del expresidente Danilo Medina han sido efectivos hasta el momento, y el resto de ellas aún no han terminado o “fracasaron” porque no cumplieron su cometido.
Así lo afirmó ayer el ministro Administrativa de la Presidencia, José Ignacio Paliza, quien añadió que toda la documentación relativa al programa de Visitas Sorpresa será remitida en “un tiempo razonable” a la Procuraduría Especializada de Persecución de la Corrupción Adminstrativa (Pepca), tal y como este órgano lo solicitó.
Paliza apuntó que el Ministerio que dirige está analizando y examinando al detalle las visitas sorpresa.
La Pepca pidió que le envíen los documentos referentes al referido programa, con un informe pormenorizado y los fondos destinados para cada uno de los proyectos.
“Hay un poco de todo, en las mediciones que hemos hecho, entre un 15 y un 20% de los proyectos se mantienen con un saldo positivo, la mayoría de los proyectos están por concluir y otros no rindieron los frutos adecuados; y hay proyectos de esos que requieren una inversión de sistemas especiales de reguío para una cantidad de terreno y después resulta que no hay fuente de agua y muchas cosas de esa naturaleza”, manifestó Paliza al ser entrevistado por Multimedios de elCaribe.
En ese contacto periodístico, detalló que el Ministerio Administrativo solo dirigía y organizaba el Programa de Visitas Sorpresa, pero que el grueso de los recursos procedía de otras instituciones, como el Ministerio de Agricultura, el Fonde Especial para el Desarrollo Agropecuario (FEDA) y el Banco Agrícola.
“Hemos medido el impacto de las visitas sorpresa, cuáles proyectos pueden ser salvados, cuáles no rindieron sus efectos y no tiene sentido, desde el punto de vista económico, mantenerlos o impulsarlos. Hemos hecho los levantamientos para poder hacer una ponderación de esos programas porque tenemos una obligación de la continuidad del Estado”, dijo.
El funcionario añadió que lo sucedido con ese programa es una “muestra de la dualidad de funciones” que, según él, fue una “práctica que se volvió costumbre en la pasada administración”.
“Existía la cultura de generar estructuras duales, o de generar funciones que compartían distintos ministerios o instituciones; por ejemplo, en el Ministerio Administrativo de la Presidencia existía una unidad técnica de proyectos agroforestales con un presupuesto similar al del propio Ministerio; parecería que en el Ministerio Administrativo de la Presidencia había un Ministerio de Medio Ambiente paralelo”, subrayó.
La deuda es preocupante
El funcionario admitió que el incremento de la deuda pública es realmente preocupante, y dijo además que hay que abocarse a una reforma fiscal a final de año que organice las finanzas y reajuste el Presupuesto Nacional, para afrontar la problemática del endeudamiento y el déficit.
“Todos los países del mundo han tenido que acumular deudas en este tiempo de crisis y el financiamiento es una herramienta que está hecha para estos momentos, lo grave es que la República Dominicana se endeudó profundamente, en gestiones pasadas cuando no necesitaba financiamiento”, adujo como colofón.
